Con tan solo 45 días de nacida, “Nikita” comenzó una misión que la marcaría por siempre: salvar vidas, acompañando las labores de búsqueda y rescate del Cuerpo de Bomberos del municipio de Sabaneta.
A lo largo de su carrera, obtuvo 12 certificaciones, convirtiéndose en una de las unidades K9 con mayor cantidad de certificaciones del país. Su formación fue avalada por entidades como la AUI (Acción de Urgencia Internacional), la IRO (Organización Internacional de Perros de Búsqueda) y la DNBC (Dirección Nacional de Bomberos de Colombia).
Su disciplina y capacidades la llevaron también a ser seleccionada como uno de los cinco binomios —dupla conformada por guía y canino— clasificados en Latinoamérica para participar en el Mundial de Perros de Búsqueda y Rescate.
Entre los rescates más significativos, su guía, la sargento Hanny Muñoz, recuerda uno realizado en Itagüí en el año 2020: “la comunidad no creía mucho en las labores de los K9, pero ‘Nikita’, en conjunto con otro binomio, logró hallar a dos personas tras un deslizamiento. Uno de sus familiares, quien inicialmente pensaba que no era posible, se acercó con lágrimas a decirme que fueron encontrados justo en el lugar donde los perros habían señalado”.
La última emergencia, de las más de 20 atendidas por “Nikita”, fue en el departamento de Chocó durante el 2024. Tras grandes inundaciones, demostró una vez más su compromiso con la vida, acompañada esta vez por su hija “Milú”, quien hoy continúa sus pasos como parte activa del equipo de búsqueda y localización de Bomberos Sabaneta.
Actualmente, “Nikita” tiene 12 años y se encuentra jubilada desde junio de 2024. Disfruta pasar el tiempo libre con su familia, rodeada de afecto y jugando a la pelota.
Aunque ya no está en servicio activo, su instinto protector y su legado siguen vivos en cada búsqueda, en cada rescate, en cada vida salvada. Su legado fue reconocido durante el Día Internacional del Perro de Rescate, que se conmemoró el sábado 27 de abril.