Con esta solución se sustituirá el 34 % de la demanda de energía del fuerte militar, que alberga alrededor de 22 mil personas, equivalente a poblaciones como El Carmen de Bolívar, en el departamento de Bolívar o El Banco, en Magdalena.
Con la solución solar fotovoltaica de EPM en Tolemaida se evitará la emisión de 116.300 toneladas de dióxido de carbono (CO2), aproximadamente, durante sus 20 años de operación, lo que equivale a la siembra de más de 311 mil árboles.
“Para nosotros es muy satisfactorio contribuir a que cada día más empresas e instituciones avancen en un propósito que compartimos, como es el cuidado del ambiente y afianzarnos como aliados en la realización de proyectos que posibiliten el uso de energías más limpias y aporten a la disminución de emisiones de CO2”, indicó John Maya Salazar, gerente general de EPM.
Tolemaida, una solución y modalidad de venta de energía a largo plazo
Este proyecto se desarrolló bajo un modelo de contratos de venta de energía a largo plazo (PPA), que le permite al Ejército Nacional comprar la energía proveniente del sistema solar fotovoltaico y complementar el consumo de energía de la red convencional, sin hacer inversiones en activos ni en su mantenimiento, liberando presupuesto para invertir en sus actividades misionales.
En este caso, EPM realiza la inversión y se encarga de la instalación, operación y mantenimiento de la solución solar durante los 20 años de vigencia del contrato.
Aliada de las soluciones fotovoltaicas
EPM ha desarrollado soluciones para atender las necesidades de clientes y usuarios, brindándoles la energía necesaria para desarrollar sus actividades cotidianas y procesos comerciales e industriales. Esto se refleja hoy en más de 900 instalaciones distribuidas en 20 departamentos de Colombia, entre hogares, empresas y grandes consumidores.
A la fecha, son más de 55 MWp vendidos y más de 100 mil paneles solares con los que se evitará la emisión de más de 52 mil toneladas de dióxido de carbono por año y equivalen a la siembra de alrededor de 2.8 millones de árboles y al consumo energético de ciudades como Girardot, en el departamento de Cundinamarca, o Buga, en el departamento del Valle del Cauca.
La empresa expresa así su compromiso con la transición energética y se consolida como aliado energético de sus clientes y usuarios para facilitar el acceso a energías más limpias, que ayudan a disminuir su huella de carbono, impulsando el desarrollo tecnológico, permitiéndoles ahorrar en costos y aportar a la sostenibilidad del planeta.