En 1974, David Díez Mejía transformó la historia de su vida con un pequeño trueque. A cambio de su carrito, recibió un lote de confecciones que marcaría el inicio de un sueño: fundar una marca propia. Así nació Pícoli, un negocio de ropa infantil que, años después, se convertiría en Bianchi Moda.
A sus 88 años, Díez recuerda con claridad cómo la necesidad lo llevó a emprender. Proveniente de una familia de 12 hermanos y con limitaciones económicas, sabía que debía buscar su propio camino. Aunque sus primeros intentos no fueron exitosos, su perseverancia lo llevó a encontrar en las confecciones el terreno ideal para crecer. “Fue con las prendas que descubrí que podía construir algo duradero”, ha comentado en más de una ocasión.
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En sus primeros años, Bianchi se dedicó a la moda masculina, pero rápidamente encontró su identidad en la ropa femenina, adoptando el colibrí como símbolo de la marca. Esta ave, reconocida por su capacidad de adaptarse y superar adversidades, reflejaba perfectamente el espíritu de la empresa.
Actualmente, Bianchi Moda genera 55 empleos directos y más de 200 indirectos, gracias a alianzas de maquila. Su filosofía empresarial prioriza el bienestar de los trabajadores, algo que quedó demostrado durante la pandemia, cuando Díez decidió mantener los salarios y evitar despidos.
1974
es el año en que nace oficialmente Bianchi.
1990
es el año en el que comienzan a vender ropa femenina, de la mano de la diseñadora Gloria Carvajalino.
Su estabilidad le ha permitido tener una solidez financiera y proyectarse hacia nuevos mercados nacionales e internacionales. Hernán Gutiérrez Correa, quien ha trabajado junto a Díez durante 40 años, lo resume así: “Es increíble lo que ha logrado en un sector tan cambiante. Su organización y constancia son la clave”.
Bianchi Moda no solo ha vestido a generaciones de mujeres colombianas, sino que también se ha convertido en un símbolo de resiliencia y visión empresarial. Su capacidad para combinar modernidad y tradición la mantiene vigente, con colecciones que apelan tanto a jóvenes profesionales, como a mujeres ejecutivas en busca de elegancia y versatilidad.