Aún no he terminado de comprender el milagro que eres, pero acá estoy, esperando ese momento en que tus brazos rodeen mi cuello, y con un simple “te quiero papá”, hagas que mi mundo pare para decirme que soy la persona más afortunada del mundo de tenerte.
Te confieso que desde que me enteré de tu llegada, mi concepción del amor ha cambiado. Tu madre ya me ha enseñado bastante al respecto en los últimos años, pues siento que pase de ser un troglodita en el amor, a tener algún nivel de consciencia. Pero sólo de pensar en tí, siento que el concepto amor está aún por descubrirse.
Quiero que sepas que desde ya, cuentas con tu fan #1. Con la persona que estará ahí, no importa qué. Alguien en que puedes confiar, con quien podrás hablar, preguntar, o simplemente estar. Mi silencio es tuyo, mi tiempo es tuyo, mi vida es tuya. Ahora mi prioridad cambia, ahora mi prioridad eres tú.
Y con esto dicho, mi compromiso no sólo será amarte, pues eso ya es muy fácil. Ni se como te ves y ya te convertiste en lo más importante. Mi compromiso contigo será servir de guía, de ejemplo, de papá. Será de estar, escuchar, enseñar. Atajar, experimentar, aprender ¡cuánto vamos a aprender juntos! Reconocer, tener criterio, tomar perspectiva. Tener conversaciones difíciles y a partir de ellas, forjar relaciones que valga la pena tener.
Mi misión no será decirte qué hacer, sino darte todas las herramientas para que tú decidas, pero que en cada decisión no sólo encuentres paz, sino realización, y que el mundo, con cada decisión que tú tomes, sea un lugar mejor.
Sofía, estoy lejos de ser perfecto. Estoy lejos de ser el mejor (lo que sea que esto signifique). Pero ten claro que cada día me esforzaré por conocerme un poco más, por escucharme un poco más, por amarme un poco más. Pues si yo estoy bien, podré ayudarte a que tú también lo estés.
Mi compromiso contigo, es que en este proceso el mundo gane por dos y que ambos seamos mejores seres humanos.