Durante la intervención se hizo también la acometida eléctrica mediante obras civiles con el fin de mejorar la infraestructura.
“Es una estación importantísima, porque cerca de 1.200 usuarios al mes transitan por este punto de la ciudad. Seguimos en el proceso de recuperación, también con la estación Nutibara”, puntualizó Paula Andrea Palacio Salazar, directora del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
Por su parte, la estación Nutibara, que operaba a solo un 16 % de su capacidad, es clave para conectar rutas principales del transporte público urbano, y representa un punto de acceso esencial para los usuarios del sistema de bicicletas públicas.
Adicionalmente se avanza en la recuperación de dos estaciones que nunca entraron en operación: La Playa, en la Clínica Soma, y la Casa de la Cultura de los Colores. Los trabajos abarcan desde la infraestructura civil hasta componentes eléctricos, para dejarlas completamente operativas para el funcionamiento del sistema.