En procura por salvaguardar la integridad del río Aburrá-Medellín, la Unidad de Emergencias Ambientales del Área Metropolitana monitorea el afluente en 12 puntos estratégicos del territorio. Esta vigilancia tiene como objetivo identificar cualquier alteración al cuerpo de agua, como cambios en color, presencia de espuma o vertimientos de aguas residuales domésticas.
Durante este año la unidad ha realizado alrededor de 200 visitas de vigilancia y control al río y sus afluentes. El equipo multidisciplinario está compuesto por ocho personas entre ingenieros sanitarios, ingenieros ambientales y tecnólogos ambientales, quienes trabajan arduamente para garantizar la salud y limpieza del río Medellín.
Las revisiones diarias se efectúan en diferentes horas del día, los siete días de la semana, además se adelantan reportes fotográficos para análisis y seguimiento. Esta labor minuciosa garantiza una respuesta oportuna ante posibles amenazas.
Desde 2016 se han identificado aproximadamente 15 empresas responsables del vertimiento de color en el río. A todas las empresas se les realizaron informes detallados y se iniciaron las acciones administrativas respectivas. Varias de estas industrias implementaron plantas de tratamiento de aguas para eliminar el color, mientras que otras corrigieron las conexiones erróneas que estaban causando el problema.
Con estos esfuerzos se ha logrado reducir significativamente los vertimientos de color en el río Aburrá, generando un impacto positivo en la región metropolitana.
“Cuando la autoridad ambiental recibe denuncias ciudadanas a través de la línea de atención al usuario y redes sociales, se activa un protocolo inmediato que incluye la colaboración con entidades como EPM y las secretarías de Medio Ambiente municipales para revisar de donde provienen las coloraciones o posibles aportantes de contaminantes al recurso hídrico”, aseguró Álvaro Zapata, líder de Vigilancia Ambiental del Área Metropolitana del Valle de Aburrá.
Las personas o empresas que sean sorprendidas atentando contra el recurso hídrico, podrían recibir multas entre los 200 y 500 salarios mínimos legales mensuales vigentes y la imposición de medidas preventivas definidas en la ley.