Si usted cree que el entorno empresarial ha cambiado rápido en los últimos años, prepárese porque esto solo el comienzo. Según el informe de Accenture Pulse of Change, los líderes empresariales se enfrentan este año a una velocidad de cambio sin precedentes. Algunos ven oportunidades y esperan que el cambio se acelere mucho más en 2024. Sin embargo, el 52% no sienten estar preparados para este ritmo acelerado, y son conscientes que no todos los retos a los cuales se enfrentan tienen ver con las tecnologías emergentes. El ambiente geopolítico, el talento y los cambios en los hábitos de consumo y pensamiento de las personas son otras dimensiones que hacen necesario que los negocios innoven, escalen o se transformen.
Transformar una empresa es un proceso que requiere inducir un estado de entropía controlada (en esencia, un poco de desorden), para romper sistemas rígidos, rediseñar la organización y sus procesos, y apuntarle a lograr retos desafiantes. Pero, esto requiere de tiempo y requiere de experiencia. Así que, si usted lidera una empresa ya sea pequeña, mediana, o grande y no ha empezado un proceso de transformación para abordar las realidades empresariales actuales, lo primero que debe considerar es tener un sentido de urgencia. Innovar, crear, cambiar su modelo de negocio o modificar la forma en la que se hacen las cosas toma tiempo, y es más fácil hacerlo si cuenta con los recursos suficientes para explorar mientras se fortalece el negocio actual. No se debe esperar a que haya una caída del mercado, que se pierdan los clientes importantes o que haya una baja en ventas para empezar a pensar en transformarse, ya que esto puede disminuir considerablemente sus probabilidades de lograrlo.
Lo segundo, es que se requiere experiencia. Personas que hayan vivido situaciones similares, que conozcan el mejor camino para innovar y crear nuevas verticales de crecimiento y que no les de miedo enfrentarse a la incertidumbre o a un sistema inmunológico fuerte. No necesariamente significa contratar más gerentes o burocratizar la transformación, pero sí es importante contar con líderes que la impulsen. Es indispensable crear un grupo que se atreva a crear iniciativas, que rompa el statu-quo, que acompañen a otras personas y que inspire a la organización hacia una visión común. Este grupo de líderes debe ser impulsado y acompañado dentro de un ambiente de seguridad adecuado para que puedan experimentar y crear.
Transformar una empresa es un proceso largo y complejo. No se pueden cortar esquinas y es una necesidad sobre la cual deben tener sentido de urgencia empresas pequeñas, medianas y grandes. Se requiere la experiencia correcta para hacerlo, y el talento hoy en día es más costoso que el capital. Se debe acompañar, promover y recompensar a los líderes de la transformación para que las organizaciones puedan adaptar e innovar en su negocio actual, mientras desarrollan oportunidades enfocadas en solucionar nuevos retos desafiantes.