Terminaron 34 años de servicios de El Repostero, en Provenza. Esta casa de repostería fina cierra su local de la Divina Eucaristía, agradeciéndole a sus clientes “por haberlos podido acompañar en los momentos más especiales, en sus celebraciones. Durante años hemos preparado para ustedes miles de suspiros, bizcochos de manzana y nuez, galletas, brownies y María Luisas; lo hemos hecho con todo el amor y dedicación. Hemos llegado a una nueva etapa y con ella cerramos nuestras puertas con la gratitud y orgullo de haber recorrido este camino juntos”. Al consultarles sobre las razones de su ida, alegan: “Este barrio es diferente casi en todo a lo que vivimos y disfrutamos por años”. Mantienen su punto de venta en la clínica Las Américas.