Por Luisa Martínez
“Estamos preocupados por el alto índice de hurtos a residencias en la comuna 14 en los últimos meses”, informa el intendente Juan Benjumea, de la Policía de El Poblado. Asegura que hasta el 6 de mayo de 2015 iban 39 robos, mientras que en el mismo periodo de 2014 fueron 18; es decir que el delito aumentó en 21 casos. El nuevo comandante de la estación de Policía de El Poblado, el Mayor Leonel Mauricio Rogeles, asegura: “Somos la comuna de Medellín en la que más se roba a residencias”. Este informe fue entregado el miércoles 13 de mayo, cuando la Policía de El Poblado, debido a la situación que se está presentando, invitó a las empresas de seguridad de la zona y a los administradores de las unidades residenciales a una reunión informativa. “Llamamos la atención para que, de manera conjunta, creemos estrategias”, precisa el intendente Benjumea. Así mismo, explica que las modalidades más usadas por los delincuentes son la reconocida llamada millonaria y el “factor oportunidad”.
Según su informe, de los 39 hurtos, 12 son por violación de cerradura, 12 por llamada millonaria, 10 por factor oportunidad, 2 por llave maestra, 1 por atraco, 1 por escopolamina y 1 por ventosa (daño a ventanas, puertas o paredes). Los barrios en donde se han reportado más casos de la llamada millonaria son Altos de El Poblado, Castropol, Los Balsos 2, Santa María de Los Ángeles, Aguacatala, Patio Bonito y El Tesoro.
Por el factor oportunidad se dieron casos en Lalinde, Florida, Diamante, Los Naranjos, Altos de El Poblado, Patio Bonito y Castropol. En este tipo de modalidad, por oportunidad, “hay casos de edificios altos en los que los implicados encuentran la manera de escalar”, agrega el intendente Benjumea. También dice que se debe a que los residentes no toman medidas como cerrar las ventanas o a los comportamientos de algunos vigilantes que no controlan el acceso de los visitantes o hacen labores que no les corresponde, como entregar domicilios o hacer limpieza. Frente a este punto, algunos directivos de las empresas de seguridad admitieron que el manual de la Superintendencia de Vigilancia y Seguridad Privada define los protocolos sobre lo que debe y no debe hacer un guardia de vigilancia. Sin embargo, en ocasiones y por motivos de competencia, incluyen otros servicios por petición de las administraciones.
En cuanto a las llamadas millonarias, el 80 por ciento de ellas “están saliendo de las cárceles”, anuncia el comandante, Mayor Rogeles. Algunas las reciben las amas de casa, pero las empleadas de servicio doméstico son, por lo general, las principales víctimas. Los delincuentes crean historias sobre problemas de sus jefes con entidades como la Fiscalía o la Dian y ellas, asustadas, siguen indicaciones o consignan dinero. Aunque las empleadas de servicio doméstico se ven involucradas “se comprobó que el 80 por ciento de ellas no están vinculadas con los robos”, asevera el intendente.
Entre sus recomendaciones está tener cuidado sobre la información que se da en centros comerciales, almacenes, entidades o lugares de eventos, puesto que “no sabemos dónde va a parar” y verificar los antecedentes de las personas que se contratan.
En conclusión, la capacitación sobre este y demás modus operandi debe ser para los guardias, las personas de servicios varios, los administradores y los propietarios, y debe haber una corresponsabilidad entre todos para crear sectores seguros. Por eso se solicita a los administradores y empresas de seguridad incentivar las campañas educativas.
Denuncias, propuestas y quejas se pueden enviar al correo [email protected] o llamar a la estación de Policía de El Poblado al 385 7420. Para denunciar un caso de llamada millonaria se puede comunicar al 123 o al 165 del Gaula, o dirigirse a su punto de atención en Guayabal (cr 51 # 14 259).