Temporada de guayacanes, especies nativas que engalanan a Medellín

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Dos veces al año, por esta época cuando el año inicia y entre junio y julio, el intenso color de los guayacanes amarillos (Andro hantus chrysanthus) se lleva suspiros de transeúntes y residentes que se deleitan con la estética que genera esta especie.

El guayacán rosado (Tabebuia rosea), que en la costa colombiana es llamada Roble, también habita en Medellín y su área metropolitana, aunque en menor densidad.

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Las dos especies son nativas de Colombia y se encuentran desde Centroamérica hasta Suramérica en Colombia, Venezuela y Perú y tal como lo dijo a Vivir en El Poblado Juan David Fernández, coordinador de Colecciones Vivas del Jardín Botánico de Medellín, están más asociados a las zonas bajas y cálidas mientras que los amarillos son de climas medios.

El guayacán rosado es común en zonas más secas como Caucasia y allí florecen de un rosado muy intenso. “Aquí en Medellín tienen en este momento una buena floración y están muy influenciados por la época de verano”, dijo Fernández.

Florecen dos veces al año, en verano, confirmó el coordinador de Colecciones Vivas del Jardín Botánico de Medellín. Ello ocurre porque en la ciudad hay una estacionalidad bimodal, es decir que hay dos períodos de sequía y dos periodos de lluvia.

“Las floraciones son muy cortas, pueden durar entre cinco y 10 días. Antes de florecer bota todas las hojas, luego bota la flor y recupera inmediatamente el follaje”.

Los servicios ecosistémicos que le brindan a la ciudad les otorgan una evidente importancia. Atraen fauna como loras y guacamayas, especies que se alimentan de sus frutos y semillas y la vez, siguen produciendo semillas que se pueden propagar para seguir enriqueciendo las zonas verdes.

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Es una especie que requiere de paciencia, después de sembrados, algunos florecen a los 7 años, pero la mayoría tardan entre 10 y 15 años. Si florecen antes, explicó Juan David Fernández, podría asociarse al estrés del verano, “por la falta de agua entonces eso induce la floración y la fructificación para producir semillas para poder propagar la especie”.

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