La Secretaría de Movilidad apelará el fallo de un juzgado que afecta el programa del carril Solo bus. De perder el caso, debe cambiar la señalización, que valió 7 mil 400 millones de pesos.
Los carriles solo para buses casi que brotaron del asfalto de un día para otro, sin consideración por la pedagogía, la socialización y la participación ciudadana. Señaladores verticales, bordillos, estoperoles y pintura irrumpieron cierto día en la cotidianidad de la avenida El Poblado y, sobre la marcha, pusieron en aprietos a los conductores.
¿Dónde hacer los giros a la derecha? ¿Cómo entrar al negocio que tiene estacionamiento al lado de la calzada? ¿Por dónde deben ir los taxis? ¿Por qué si el espacio es solo para buses, hay vehículos de ese tipo rodando por los otros dos carriles? ¿Es procedente definir un carril exclusivo en una calzada de dos?, han sido preguntas de ciudadanos desorientados.
El Juzgado ampara derechos a la seguridad y a la salubridad pública, reclamados por un colectivo ciudadano. El programa funciona hace 27 meses y todavía genera dudas en
el tráfico.
El desorden provino de donde menos debería: de la secretaría de Movilidad, que si bien ha ofrecido estos 27 meses información sobre el funcionamiento y la utilidad del Solo bus, debe ser evaluada en cuanto a la oportunidad, el rigor y el alcance del mensaje.
La inconformidad ciudadana también se expresó en el Juzgado Administrativo 15 de Medellín, donde un colectivo de motociclistas consiguió la orden de retirar los elementos demarcadores. El Juzgado, en amparo de derechos de los conductores a la seguridad y a la salubridad pública, conminó el sábado 20 de octubre a la Secretaría de Movilidad a reemplazar antes de tres meses este tipo de demarcación.
Convencido de la utilidad del sistema, el secretario de Movilidad, Humberto Iglesias, señala que apelará el fallo porque la división de usuarios ha contribuido con la seguridad vial en los corredores donde funciona: 84 kilómetros distribuidos en la 43A de El Poblado, San Juan, Colombia, Guayabal y La 80. Según su balance, en dos años los incidentes viales bajaron de 2.446 a 2.143, los buses están logrando un 11% más en eficiencia de tiempos en los viajes (¿Contarán los que ruedan por fuera de los carriles exclusivos?) y arrojan el menor número de accidentes mortales desde 2007. No hay hoy mención de las cinco muertes producidas en los primeros tiempos de uso de la medida.
La defensa del Municipio se lee seria y destaca logros de seguridad y de salubridad pública, justo por donde ciudadanos le movieron el caso en el Juzgado. Que sea seria es lo mínimo esperable, después de tantas fallas de aplicación del sistema que les valió a las arcas públicas, entonces a los dineros de los contribuyentes pagados mediante impuestos, 7 mil 400 millones de pesos.